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El “Monstruo de Cañada Honda” le rogó a la abuela de 80 años que le alquilara una habitación y le pagó estrangulándola para robarla

|Con información de nad
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Carmen Segunda Ramírez Pineda, hoy cumpliría 80 años de edad pero cuidaba tanto su apariencia física que aparentaba unos 60. Era tan generosa como alegre. A  su edad aún tenía muchos sueños y hasta mantenía un romance con un hombre 20 años menor que ella. Era muy querida pero un joven a quien ella le tendió la mano alquilándole una habitación junto a su pareja, la asesinó estrangulándola ayer por la mañana para luego desvalijarle la casa.

La abuela tenía dos hijos, un varón residenciado en el oriente del país y una hembra domiciliada en Maracaibo. Hace 25 años enviudó y desde entonces decidió usar su casa en la calle 96F del sector  Cañada Honda  de Maracaibo como pensión. Hasta ayer tuvo cuatro inquilinos, dos mujeres, un hombre y una pareja. Esta última estaba alojada en un cuarto en el interior de la casa, cerca de donde dormía Carmen. Un joven a quien apodan “Chicho”, hace seis meses le rogó para que le diera alojó junto a su mujer.  La abuela con gusto aceptó sin imaginarse que iba a convivir con su asesino.

La ausencia de Carmen Segunda frente a su casa ayer fue visto como algo extraño. Todas las mañanas barría la acera y el martes no lo hizo. Lo que si observó uno de los vecinos fue un camión estacionado por un costado de la casa de esta octogenaria mujer, quien desde el año de 1966 habitaba allí. En ese vehículo subían cosas pero quien veía pensó que se trataba de un inquilino más que se mudaba.

Lo cierto es que se trababa de un robo. “El Chicho” metía en el camión casi todo el mobiliario de Carmen Segunda. Muebles, cocina, nevera, televisor, aire acondicionado y otros artículos del hogar que la dama tenía en su casa.

Eran como las diez de la mañana del martes cuando el sujeto comenzó a desvalijar la casa. Ya para entonces había asesinado a la abuela colocándole una bolsa en la cabeza y estrangulándola. No fue hasta en horas de la tarde cuando una de sus sobrinas vio la puerta abierta y entró. En segundos la halló sin vida en la sala sanitaria.

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Enseguida la casa fue rodeada por vecinos y familiares de la víctima. Seguidamente comenzaron a surgir las historias sobre aquel joven inquilino y su pareja. Carmen era una mujer que se condolía mucho de las necesidades de los demás y cuando ese extraño muchacho le pidió que le alquilara una habitación, no dudo en tenderle una mano. Pero al cabo de unos cuatro meses la dueña de la casa le comenzó a llamar la atención a “El chicho” y su pareja porque violentaba varias de las normas que ella había establecido. Una de ellas se refería a no llegar en horas de la madrugada. Por una serie de anormalidades lo mando a desocupar. Ayer finalmente lo hizo pero llenándose las manos de sangre. Por lo que hizo este sujeto ya es llamado el “Monstruo de Cañada Honda”.

La noticia del asesinado de Carmencita, como le decían quienes le tenían cariño, se extendió en segundos. Indignación y repudio se apoderaron de propios y extraños. Una comisión de homicidios del Cicpc-Zulia se presentó a la escena del crimen y tras hacer una inspección levantaron el cadáver para llevarlo hasta la morgue forense de Maracaibo.

El nuevo jefe de la base de homicidios del CICPC-Zulia, comisario Leonel Trasmonte, encabeza las labores de investigaciones para dar con el asesino. Trascendió que desde esta mañana se practican varios allanamientos para dar con él.

Por su parte los deudos de la alegre abuela comentaron que está será sepultada mañana en el cementerio Corazón de Jesús. Sobre el asesino pidieron a las autoridades aplicar el máximo castigo. “Se aprovechó de la nobleza y la bondad de mi abuela para matarla. Ella quería mucho a las personas y le daba mucha confianza. Por eso la asesinaron…por buena gente”, dijo Carmen Padrón, una de sus nietas.

Esta era la casa de Carmen Ramírez y el lugar donde la asesinó uno de sus inquilinos

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