Victor Álvarez: Candidaturas únicas de la oposición hubieran barrido a los candidatos del gobierno

Sin embargo, aclaró que no hubo sorpresas, los candidatos chavistas obtuvieron 20 de las 23 gobernaciones y 205 de las 335 alcaldías, a su juicio, «ese es el resultado de la dirigencia opositora, no del CNE y el gobierno».

Considera que de los comicios del 21 de noviembre, «quedó una oposición dividida y desmoralizada».

A pesar de que la abstención del 58% favoreció al PSUV, según interpreta, Álvarez enfatiza que sus candidatos «hubieran sido barridos, si el país descontento hubiese votado masivamente por candidaturas unitarias».

«La dispersión del voto opositor sentenció el triunfo del gobierno. Al menos en 14 estados, al candidato de la oposición que llegó de segundo, le hicieron falta los votos del que llegó de tercero para ganar», detalló.

De acuerdo al economista, los principales partidos de oposición «tenían la posibilidad de construir una alternativa al chavismo, desde las alcaldías y gobernaciones, de cara a las presidenciales de 2024».

«Querían ganar pero postularon varios candidatos al mismo cargo, se impusieron sus ambiciones personales y subordinaron el interés nacional», cuestiona.

Reitera que un candidato único de la oposición «habría doblado la votación del candidato de gobierno en cada estado y municipio».

Asegura que «no fue la abstención, sino la división del caudal electoral del país descontento, la causa de la derrota».

Álvarez explica que «cinco años llamando a la abstención hicieron daño a una a una oposición conformada por micropartidos, que al abstenerse de participar en las anteriores elecciones, debilitaron el fortalecimiento de sus estructuras organizativas y no pudieron enfrentar la maquinaria oficialista».

Recuerda que a esa Venezuela olvidada por los políticos, «también se le ha olvidado los políticos y esa fue la que no salió a votar».

«Esa Venezuela desgastada en la lucha por su subsistencia, ese país decepcionado, es el caldo de cultivo para una nueva propuesta que los movilice, los interprete. Quienes no votaron volverán a la política si una nueva generación de lideres nace de sus entrañas e interpreta su sentir», insiste.

El analista opina que, «revertir el daño al voto es un proceso que comienza, que impone acumular fuerzas, capacidades y recursos entre nuevos liderazgos emergentes, los movimientos sociales y expresiones de la sociedad civil».

En tal sentido, concluye que «cada evento electoral será una oportunidad  para movilizar y organizar políticamente a la sociedad y seguir avanzando a una solución democrática, electoral y pacifica del conflicto venezolano».

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