En completa incertidumbre se encontraba una mujer, oriunda de Barquisimeto, estado Lara, Venezuela, desde el pasado lunes, cuando unos desconocidos se llevaron a su esposo y no volvió a tener noticias sobre su paradero, pero la zozobra se apoderó de ella, la tarde del jueves, cuando le avisaron que uno de los dos cuerpos hallados en una cañada de La Parada, Villa del Rosario, podría ser el de su marido.
Así lo reseñó diario La Opinión. “Mi esposo se llama Luis Ángel Ávila, de 22 años, y se lo llevaron a las malas. Me dicen que fueron dos tipos, que llegaron hasta debajo del puente internacional Simón Bolívar, donde él estaba, y con machetes en mano lo abordaron”, dijo la mujer, cuyo nombre pidió reservar.
Según el relato, los dos sujetos llegaron a las 7:00 de la mañana del lunes, justo cuando Luis Ángel estaba junto a una persona que iba a pasar la trocha y él sería su guía.
“Un compañero escuchó que le dijeron ‘eres colaborador de la guerrilla y te vamos a matar, te vamos a picar’”, narró la mujer, quien enseguida desmintió que su ser querido estuviera trabajando con algún grupo al margen de la ley.
La mujer cree que a Luis Ángel, más conocido como Calamargo, lo confundieron por su trabajo en las trochas, pues “él pasaba gente de un lado para el otro y debía cuadrar el pago con esa gente (guerrilla), porque ellos son los que controlan el paso”, especificó a La Opinión.
Luis Ángel salió el lunes de su casa a trabajar. Llevaba una camisa blanca con letras negras al frente; una franela gris, zapatos deportivos, y una gorra negra.
Sobre la suerte de este hombre, su compañera asegura que una persona le juró que el cadáver hallado en la cañada, que colinda con la antigua vía que da acceso a La Parada, correspondía a su pareja.
“Es desesperante no saber sí es o no. Me dicen que tienen que hacerle una necropsia y luego sí pueden confirmar o descartar. Sin embargo, por la camisa que le hallaron a uno de esos dos cuerpos, me dicen que podría ser”, añadió la mujer.
El doble crimen
En cuanto al hallazgo de los dos cadáveres, a las 11:30 de la mañana del jueves, unas personas que viven de manera improvisada en unos cambuches del barrio Pueblo Nuevo, en La Parada, fueron quienes lo hicieron. Estaban semidescompuestos y abaleados.
La esposa de Luis Ángel Ávila asegura que desconocidos le dijeron a su pareja “te vamos a matar, te vamos a picar”.
