En el Congreso anual de la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria), el presidente del gremio, Juan Pablo Olalquiaga, señaló que la meta a la cual aspiran llegar es a la creación de 26.000 nuevas empresas industriales que puedan generar cerca de 4 millones de puestos de trabajo, entre directos e indirectos, “de los cuales por lo menos un millón deben ser de profesionales especializados en distintas áreas, los cuales devengarían mucho más que un salario mínimo”.
Densidad industrial
El máximo dirigente de la industria nacional explicó que el medidor de densidad industrial indica que debería haber una empresa por cada mil habitantes. “Si tomamos en cuenta que la población de Venezuela está cerca de los 30 millones de personas, deberíamos contar con unas 30.000 empresas. Actualmente, de acuerdo con las proyecciones manejadas por Conindustria, apenas sobreviven 4.000 empresas manufactureras”.
Olalquiaga indicó que con las 26.000 empresas nuevas más las 4.000 existentes trabajando a plena capacidad instalada, se puede equilibrar la balanza comercial venezolana sin contemplar los ingresos petroleros.
Señaló que para lograrlo “debemos convertirnos en un país organizado, educado, capacitado, planificado, seguro y estable, cuyo entorno atraiga inversiones nacionales y extranjeras. Ese país de progreso que queremos está a nuestro alcance”.
Consideró que la realidad que vive actualmente Venezuela es insostenible si se pretende tener un país que satisfaga las necesidades materiales de sus ciudadanos. “La sociedad exige, con desesperación, un cambio radical de rumbo. Lo que sí es cierto, es que somos una sociedad políticamente secuestrada”. Aseguró que los retos para reconstruir el país son gigantescos y requieren de la participación de todos.
El representante gremial señaló que hay que tener presente que “sin empresarios no tenemos futuro posible, pero sin gerentes y trabajadores destacándose en sus funciones, tampoco. Entendamos que el país que queremos es todo lo contrario de lo que tenemos hoy”.
Afirmó que Conindustria, en representación de los empresarios industriales se para firme en defensa de virtudes éticas como la honestidad, el respeto que damos y que exigimos, el trabajo, la educación como medio de superación y decimos, “Somos y representamos a gente correcta, trabajadores, gerentes y empresarios y eso nos distingue”.
Visión
Advirtió que los industriales sí tienen una visión de país, la cual compartieron con los asistentes al Congreso Conindustria 2016; al igual que con los trabajadores, estudiantes, científicos, formadores de opinión, economistas y consumidores.
“En Conindustria hemos trabajado y transformado esa visión en propuestas concretas de políticas públicas. Estas políticas operan únicamente en un entorno de libertades, libre mercado y libre empresa, dentro de un marco de respeto a la propiedad y del respeto e igualdad ante la ley”.
Para el presidente de la Confederación Venezolana de Industriales es la oportunidad, no de reparar el país que tenemos, sino de crear uno nuevo. “En ese país nuevo que queremos, debemos construir la institucionalidad que es la que va a sostener el estado de derecho y una economía de libertades. Es ahí cuando los industriales pueden hacer grandes aportes para el progreso del país, como generar productos, puestos de trabajo, capacitación y oportunidades de desarrollo”.
Olalquiaga culminó su intervención afirmando que “los tres conceptos imprescindibles para generar la prosperidad que soñamos son estado de derecho, libertad económica e industrialización, los cuales son privilegios de la libertad política”.
