Este martes 18 de enero, el ministro de petróleo, Tareck El Aissami, informó sobre el desmantelamiento de una mafia dedicada al contrabando de combustible en el estado Táchira, donde trabajadores de la Empresa Nacional de Transporte se dedicaban a desviar la gasolina para venderla en Colombia «con complicidad de las autoridades» del vecino país.